lunes, 12 de agosto de 2013

Libros: Amar sin miedo a malcriar. Yolanda González

Quiero compartir con vosotros mi último descubrimiento: el libro de Yolanda González, "Amar sin miedo a malcriar".  Y está siendo un descubrimiento porque creo que es el mejor libro que he leído sobre crianza. Intento leerlo del principio al final, pero no hace falta; abra por donde abra, cualquier página, no tiene desperdicio. He perdido la cuenta de las páginas que he  marcado como imprescindibles.

Yolanda González, es Psicóloga especializada en clínica de adultos. Formada tanto en la teoría del apego (J. Bowbly) como en el modelo psicocorporal y preventivo (W. Reich), realiza una síntesis de ambas aportaciones.

En el libro se trata un amplio abanico de temas durante el desarrollo integral infantil, desde el momento de la concepción hasta los siete años de vida, deteniéndose en el embarazo, el parto natural, la lactancia y los primeros años, que son la base de la personalidad futura. El recorrido vital de un ser humano atraviesa varias etapas críticas desde el nacimiento hasta la muerte; la infancia es la etapa más delicada para el fomento de un desarrollo saludable en el ser humano, y sólo desde el conocimiento de sus procesos evolutivos y desde el respeto y la confianza en su autorregulación, podremos como padres fomentar vínculos seguros y futuros adultos más solidarios con la vida y el planeta.

Escrito en un lenguaje claro y directo, explica perfectamente el proceso de desarrollo infantil. Creo que como padres, es importante disponer de esta información. Esto nadie nos lo enseñó en el colegio, ni el instituto, ni lo cuentan en las noticias, ni en ningún sitio. Generalmente carecemos de información de este tipo y conforme nuestros hijos crecen, vamos viéndonos en situaciones nuevas que no sabíamos que llegarían, o peor aún, que nos había contado una amiga de una amiga o peor aún, nuestros padres avisandonos de lo terrible y difícil que es criar a un hijo, con lo que las dificultades y los modelos poco saludables siguen pasando de generación en generación.

Intento sacar algunos párrafos como aperitivo, pero es difícil porque como os digo el libro no tiene desperdicio:

"Los bebés y los niños se autorregulan. Sienten directamente cuándo tienen hambre, sed, miedo o sueño y lo piden directamente, con su lenguaje corporal y emocional. Al igual que ocurre en el reino animal, y como mamíferos que somos, los organismos vivos tienen capacidad para sentir cuáles son sus necesidades básicas y saben cómo cubrirlas"... "Ningún mamífero está mal nutrido si dispone del alimento necesario. Ningún bebé muere de hambre si se le ofrece lo que necesita. El instinto de supervivencia atraviesa todo lo que está vivo. Sólo tenemos que contactar con la necesidad primaria y satisfacerla, sea hambre, seguridad o amor. Desconfiamos de que los bebés sepan autorregular sus necesidades primariass porque desconfiamos de nosotros mismos."... "Nosotros a veces no sabemos lo que necesitamos porque hemos perdido la capacidad de contactar con nuestras necesidades vitales. En lugar del contacto se ha impuesto un funcionamiento normativo que nos aleja de nosotros mismos. Hacemos lo que debemos, lo que el otro, la pareja, la sociedad espera que hagamos"...

 "La resignación es la base caracterial que interesa a algunos gobiernos e instituciones desde el poder. Personas obedientes, sumisas, que no protesten"... "Y se inicia en los primeros meses de vida. Los bebés aprenden. Aprenden con dolor y angustia a callar y ya no molestan con su llanto inoportuno. Se hacen "buenecitos", ya no protestan, pero han renunciado al legítimo derecho biológico y emocional del apego seguro."

"Ponernos en el lugar de la criatura, tratar de entender qué le pasa y el porqué de un comportamiento, no significa en absoluto que se esté hablando de negar la función de los límites, sino en cuándo, cómo y porqué. Es decir, si vamos a aplicar un límite, este no puede ser caprichoso, arbitrario y fruto de nuestra irritación. El 'porque lo digo yo' o 'porque sí' no son límites, sino el reflejo de la impotencia adulta. Representan el ejercicio de una imposición autoritaria. Los límites impuestos de esta manera sólo crean sumisión o rebeldía."... "Desde un punto de vista saludable, educativo y constructivo para su desarrollo, nos interesa tener presente que el límite debe responder a un criterio de coherencia y respeto por su ritmo madurativo."


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